La forma en que la opinión pública traduce la información económica en opiniones sobre sus líderes es un tema fundamental en la relación entre economía política y la política de masas. El famoso estudio de MacKuen, Erikson y Stimson (1992) demostró que existe un modelo de voto económico basado en expectativas racionales, donde el público no juzga al presidente a partir de la forma en que el desempeño económico del pasado los ha afectado personalmente (como “campesinos”), sino a partir de como el estado de la economía nacional, y/o de la implementación de ciertas políticas, puede afectar el desempeño de la economía en futuro (como “banqueros”). Aquí usando una serie mensual de datos sobre aprobación presidencial, indicadores objetivos de condiciones económicas y niveles de confianza de los consumidores, testeamos qué tan bien aplica este modelo para el caso de Uruguay. Los resultados permiten rechazar tanto la lógica del “campesino” como la lógica del “banquero” y, en cambio, sugieren que los uruguayos juzgan al Presidente a partir de la información sobre la economía a partir de evaluaciones prospectivas sobre su economía personal. Dado que el proceso toma los elementos personales o egotrópicos de la lógica del “campesino” y los elementos prospectivos de la lógica del “banquero”, mezclamos estas caricaturas para concluir que la economía política de la aprobación presidencial en Uruguay se asemeja a la de un “ahorrista”.
Palabras clave:
economic vote, presidential approval, Uruguay, egotropic and socio tropic perceptions, prospective and retrospective economic perceptions.
Carlin, R., & Hunt, K. H. (2015). ¿Campesinos, Banqueros o ahorristas? La economía y la aprobación presidencial en Uruguay. Política. Revista De Ciencia Política, 53(1), pp. 73–93. https://doi.org/10.5354/0719-5338.2015.38151